Por: Alden Bergeron, RDN, LD/N; Gerente de Nutrición en Poverello
En los Estados Unidos, las industrias de publicidad y marketing de alimentos han enfocado con mucho tacto su objetivo de atraer a los consumidores infantiles y adolescentes. Las técnicas de marketing de alimentos que se usan comúnmente para llegar a niños y adolescentes incluyen publicidad estratégica por televisión,Internet,marketing dentro de las escuelas,colocación de
productos dentro de las tiendas y logos de marcas de productos[1]. El marketing específicamente orientado a los jóvenes afecta directamente sus elecciones de alimentos,preferencias de comida y hábitos alimenticios que llevan consigo a la adultez.Desafortunadamente,la mayoría de alimentos que se comercializan para los jóvenes son significativamente altos en calorías,azúcar refinada,sodio y/o grasas saturadas.Como resultado,la obesidad infantil en los Estados Unidos ha estado creciendo a un ritmo alarmante.La obesidad infantil puede provocar muchos riesgos de salud adversos potenciales como obesidad en la adultez,diabetes,enfermedades cardiovasculares,cáncer y muerte prematura.
La epidemia de obesidad infantil puede atribuirse a las técnicas de marketing saturadas que se orientan a los jóvenes y a los estilos de vida cada vez más sedentarios de la juventud actual. Las tasas de obesidad coinciden con el aumento de horas que se pasan tras una pantalla en dispositivos como computadoras,tabletas,videojuegos y la televisión. Las investigaciones han hallado que los niños expuestos a más de tres horas de televisión al día son 50% más propensos a tener sobrepeso u obesidad[2]. Los programas para niños que se ven en televisión están dominados por aproximadamente un 50% de publicidad de alimentos no saludables, como dulces,bocadillos,cereales,jugos de frutas y comida chatarra[2].Deben implementarse esfuerzos de prevención para combatir la excesiva ganancia de peso a medida que los niños y adolescentes van convirtiéndose en adultos.Los adolescentes que tienen una condición física pobre y/u obesidad son más propensos a desarrollar enfermedades crónicas como las enfermedades cardiovasculares y diabetes posteriormente en la vida[4].Un estudio reciente examinó la correlación entre el estado cardiorrespiratorio y el peso de los adolescentes varones entre los 16 y los 19 años;el estudio concluyó que un estado cardiorrespiratorio pobre estaba estrechamente relacionado con discapacidades a futuro; el peor riesgo se observó en personas obesas[4].
Establecer hábitos alimenticios saludables a una edad temprana es fundamental para prevenir la obesidad infantil.Los generalmente imitan los hábitos alimenticios de sus padres;por tanto, es esencial que los padres ilustren la importancia de consumir alimentos saludables versus alimentos procesados.Acercarse a los alimentos consumidos con una mentalidad terapéutica podría prevenir resultados de salud adversos potenciales posteriormente en la vida. Hipócrates,médico griego de la Antigua Grecia,era famoso por su frase:“Deja que los alimentos sean tu medicina y que las medicinas sean tu alimento”. Las personas tienen la opción de consumir alimentos que sirvan para prevenir enfermedades crónicas o consumir alimentos que resulten en diversas enfermedades crónicas. Implementar cambios terapéuticos en el estilo de vida a edad temprana asegurará que niños y adolescentes crezca para llegar a ser adultos saludables. Además de establecer hábitos alimenticios saludables, también es importante participar en actividad física de rutina para combatir la ganancia de peso accidental.Las Directrices dietéticas para los estadounidenses sugieren que los niños y adolescentes mantengan un equilibrio saludable entre calorías y energía para prevenir el riesgo de una excesiva ganancia de peso[3]. Los padres deben establecer límites a las horas que pasan los niños tras una pantalla y alentarlos a realizar 60 minutos de actividad física diaria para combatir la indeseable ganancia de peso. Las familias pueden participar en actividades físicas juntas,como montar bicicleta,ir de excursión,nadar,practicar yoga o jugar deportes en su parque local. Establecer una rutina diaria de actividades físicas reduce las posibilidades de que su hijo tenga sobrepeso u obesidad en el futuro.Recuerde,¡coma bien y juegue mucho!
Poverello Center, Inc. ofrece comidas nutritivas, servicios y elementos básicos para vivir con el más alto nivel de entendimiento, respeto y amor por las personas que viven con enfermedades críticas y crónicas, incluyendo el VIH, en el sur de la Florida.
References
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC416565/
https://www.apa.org/topics/kids-media/food
https://www.cdc.gov/healthyschools/obesity/facts.htm
https://www.medscape.com/viewarticle/908946?src=WNL_infoc_190322_
MSCPEDIT_TEMP2&uac=300192AJ&impID=1913995&faf=1